Hay multitud de frases manidas y una de ellas es esa de “desde que no voy en metro no leo casi nada”, bueno pues tristemente eso es cierto y nos termina pasando a todos. Aunque también he de decir que no soy un lector al uso, ni me mueven razones descifrables a la hora de elegir el próximo libro. Así que el verano pasado cayó por "azar" (que es la estrategia “secreta” en mi hábito de lectura) “Escoria” de Irvine Welsh, sí, exacto, el autor de la conocidísima película de los años 90 “Trainspotting”… que nooo, que es broma, que “Trainspotting” antes de ser una película fue un libro que casi nadie se ha leído. Bueno pues aquí os dejo la sinopsis de “Escoria” por si no lo habéis leído, tengo que decir que en numerosos casos resulta crudo y desagradable, pero es una lectura recomendable.
Irvine Welsh
"Escoria" (1998):
El sargento Bruce Robertson no es un policía modélico, sino corrupto, misántropo, violento, machista, homófobo y racista. Consume compulsivamente pornografía, servicios de prostitutas, fast food, alcohol y cocaína. Debido a sus excesos, le ha aparecido un sarpullido que invade sus genitales y un incordiante parásito en el intestino que acaba convirtiéndose en la voz de su conciencia. Y mientras su vida se desmorona, el sargento tiene que investigar el asesinato del hijo de un diplomático africano... Fiel a su habitual contundencia, Welsh nos presenta un viaje a lo más abyecto, en el que se mezclan la visceralidad, la violencia y el humor negro.
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