Tan sólo hay que sentarse en el campo, sobre la hierba fresca en un día de invierno, cuando el sol del mediodía comienza a deshelar las sombras y a calentar los cuerpos. Entonces miras alrededor y todo es paz, uno piensa “que gusto” y no va mas allá; respiras ese aire frío, pero vivo, lleno de olores que te recuerdan la cuadra, las casas de piedra, las montañas heladas, las jornadas de trabajo de los labriegos, te recuerdan que estas vivo; entonces cierras los ojos y oyes el cauce de un río que no sabes bien donde se halla, el canto de los pájaros, la hierba mecida por el viento de la mañana a quien también saludan los árboles, las vallas y las piedras. Descubres toda una sinfonía en la naturaleza, aquel silencio tan lleno de vida, aquel susurro vital tan sigiloso, que no callado. Sorprendido abres los ojos, giras la cabeza y ves unos terneros pastando cerca de ti, ellos te observan mientras rumian el pasto y aunque no te quitan ojo, tampoco despiertas en ellos un interés sólido, pues su expresión es más bien aburrida, te quedas allí unos veinte minutos manteniéndoles la mirada y comienzas a preguntarte que pensarán ellos de ti. Nada bueno, es lo primero que te viene a la cabeza, pero no, al final llegas a la conclusión que ni siquiera eso, si te pones en su piel te consideran un ser inquieto, que suele ir en manada, que somos alborotadores por naturaleza y dañinos en muchos casos, de ahí que no nos teman pero si desconfíen, y desconfían, porque no saben muy bien cual es nuestro fin. Al lobo le temen por que saben que es su depredador y que si tiene hambre las perseguirá hasta que de caza a alguna de sus crías, a los caballos los respetan y conviven en paz con ellos, pero del hombre duda, pues no tiene una conducta definida, unas veces es bondadoso con ellos y en cambio otras los corre a pedradas. Somos poco de fiar para ellos, por eso depositan su confianza en tan sólo unos pocos de nuestros congéneres, los pastores, porque a ellos si los conocen bien y confían en ellos, en sus conductas y reacciones, pero del resto nada se sabe.
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